Esta ha sido una pregunta planteada en clase ayer, a la que he buscado la respuesta.
Los egipcios y los mesopotámicos dieron vida a los primeros calendarios que se basaban en el ciclo de la Luna. En Mesopotamia se creó un calendario de doce meses de 29 y 30 días alternos, a los que añadían un mes cada determinado tiempo para corregir el desfase. En Egipto tenían un calendario de 365 días que se dividía en doce meses de 30 días más 5 días que servían de ajuste, sin embargo, consideraban las semanas de 10 días, lo que crea un desajuste en el conteo de los meses.
Los griegos y romanos contaron las semanas de 7 días. El calendario Juliano fue usado por Julio Cesar en el 46 a.C., una anécdota de este año es que intentaron arreglar los desfases del calendario Egipcio, por lo que añadieron 23 días más al mes de febrero y dos meses extra, por lo que el año tuvo 455 días y ha sido el más largo. Este nuevo calendario añadía un día extra cada 4 años, lo que llamamos " año bisiesto".
Por último apareció el calendario Gregoriano, fue utilizado por el Papa Gregorio XIII en 1.582, y modificó el Juliano, que evita que los años bisiestos sean en centena, excepto, cuando sean divisibles entre cuatro, de forma que el 1900 no fue bisiesto y el 2000 sí, otra anécdota es que el año 1582 fue el más corto porque se decretó que el día 5 de octubre fuera el 15 de octubre para corregir el desfase del calendario Juliano.
Este calendario Gregoriano se ha ido adaptando prácticamente en toda Europa y sus colonias, aunque los países ortodoxos no lo ha implantado hasta el siglo XX, pero también ha sido introducido en otros países como Japón.
Gonzalo Ibáñez Carrera 4ºB
muy interesante lo que enconre en tu blog.
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